“La IA generativa está revolucionando nuestra forma de acceder al conocimiento. Un ejemplo es “Consensus”, un motor de búsqueda de nueva generación que simplifica la exploración científica hasta límites insospechados”
Todo el conocimiento de la humanidad a golpe de un par de clics.
Hace aproximadamente 25 años, la popularización de internet supuso la mayor democratización del conocimiento que hasta el momento ha vivido la humanidad. La irrupción de la IA (inteligencia artificial) supone una nueva vuelta de tuerca en la expansión de la cultura.
Durante los últimos meses, han visto la luz una gran cantidad de aplicaciones que están cambiando el panorama de internet tal y como lo conocemos hasta ahora. Un internet mucho más eficaz, con nuevas herramientas que, por medio de la IA, nos ayudan a hacer nuestro trabajo más cómodo y eficiente.
La mayoría de estas aplicaciones están basadas en lo que se conoce como IA generativa, un campo que se centra en la creación de nuevos contenidos que no existían previamente como textos, imágenes, música o códigos informáticos. A través de algoritmos avanzados, analizan grandes cantidades de datos para generar obras originales que imitan o se inspiran en los patrones, estilos y elementos analizados.
A diferencia de los motores de búsqueda tradicionales, como Google, que nos devuelven un listado de enlaces para cada consulta, estas herramientas nos generan respuestas mucho más precisas y eficientes en forma de contenido original, como puede ser la redacción de este artículo, o la creación de la imagen que lo acompaña.
Un ejemplo que ilustra perfectamente toda esta transformación es Consensus, un motor de búsqueda impulsado por IA, cuya especialidad es ofrecer respuestas basadas en trabajos de investigación científica.
Muy sencillo de utilizar, es capaz de escanear millones de documentos resumiendo únicamente aquellas partes útiles para el usuario. Esto es de gran utilidad, ya que nos permite acceder rápidamente a información relevante y precisa sin la necesidad de leer documentos completos.
Su base de datos está compuesta por millones de documentos académicos, los cuales han sido previamente revisados, lo que garantiza la fiabilidad de la respuesta proporcionada.
Si son lectores habituales de esta columna, sabrán que las famosas alucinaciones de Chat GPT se deben a que son modelos que ofrecen respuestas basadas en bases de datos abiertas, como internet. El problema no es tanto de la IA, sino de la base de datos de donde extrae la información. Si a Chat GPT le delimitamos el marco del que extraer su respuesta, esta siempre será coherente con la pregunta.
Al pulsar en un resultado en Consensus, nos dirigirá al resumen de un artículo, con la opción de ver el texto completo. En caso de ser necesario, le podemos pedir que lo resuma con Chat GPT.
Se trata de una herramienta muy útil para estudiantes o investigadores, pero también para el público general interesado en temas como salud o bienestar, o para consultas profesionales como puede ser la gestión empresarial o estudiar la conducta del consumidor.
Es una herramienta mucho más efectiva que los motores de búsqueda tradicionales, la cual nos puede ahorrar mucho tiempo proporcionando resúmenes originales basados en evidencias científicas.