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El Ayuntamiento de Jaca destina 120.000 euros a la instalación de 90 módulos fotovoltaicos que generarán un ahorro anual de unos 6.000 euros

Cubierta sur donde se colocarán los paneles fotovoltaicos. EL PIRINEO ARAGONÉS

El complejo deportivo de piscinas, SPA, área termal y fitness será el primer edificio municipal de Jaca en disponer de una instalación de generación eléctrica fotovoltaica para autoconsumo. El proyecto, que será una realidad a lo largo de 2021, cuenta con un presupuesto cercano a los 120.000 euros y fue una de las propuestas incluidas en los presupuestos participativos de 2020. Gracias a este sistema de placas solares, que se desplegará en el faldón sur de la cubierta del edificio y en tres pérgolas metálicas, previstas en la zona verde de la piscina exterior, se prevé una producción anual de energía eléctrica de 54.000 kW/hora y un ahorro económico anual de unos 6.000 euros.

Plano con la distribución de los paneles solares

“Este proyecto surge de una modificación de crédito aprobada el pasado mes de julio, una partida de 120.000 euros procedente de los presupuestos participativos para colocar células fotovoltaicas en un edificio municipal”, explica el concejal delegado de Medio Ambiente, Manuel Díez.

Con este objetivo, se elaboró un estudio en el que los técnicos analizaron las características de los edificios municipales y valoraron su idoneidad para albergar una instalación de este tipo. De todos ellos, se determinó que los más propicios eran el complejo deportivo de piscinas y centro termal y la Escuela Infantil, por ser espacios en los que la actividad se desarrolla durante todo el año y por sus condiciones de orientación y capacidad de captar energía solar en verano, entre otros aspectos.

En un principio, la idea era haber repartido la inversión entre ambos edificios, pero finalmente se decidió hacerlo únicamente en las piscinas y el centro termal porque en el caso de la Escuela Infantil se requiere de un estudio de impacto ambiental dada su proximidad a la ciudadela. “Esto nos hubiera dilatado el proceso y por eso decidimos destinar toda la partida, los 120.000 euros, a las piscinas, aunque la idea es disponer de una instalación similar en la Escuela Infantil y en otros edificios municipales”, señala Díez.

La infraestructura solar prevista tiene una potencia de 40,5 kWp y se construirá mediante la colocación de 90 paneles o módulos fotovoltaicos distribuidos en 4 grupos. Uno de ellos será el faldón sur de la cubierta de las piscinas y centro termal y los otros tres se ubicarán en sendas estructuras metálicas, a modo de pérgolas, que se distribuirán en diferentes puntos de la zona verde de la piscina exterior, y que cumplirán una función doble: servirán de soporte de los módulos fotovoltaicos y proporcionarán áreas de sombra que podrán ser utilizadas por los usuarios de la piscina. Son estructuras versátiles, ya que, además de su función como parasoles, en caso de lluvia, permitirán la realización de actividades al aire libre en un espacio cubierto que podrá ser útil, por ejemplo, para la Escuela de Verano.

El proyecto prevé una producción de energía eléctrica anual de unos 54.000 kW/hora y un ahorro económico en torno a los 6.000 euros. “En una vivienda tipo, según los datos del Ministerio de Industria, el consumo de electricidad medio por hogar es de unos 3.500 kW/hora, y aquí vamos a producir unos 54.000 kW/h anuales, es decir, el equivalente a 15 o 16 viviendas en todo un año”, explica el jefe de sección de instalaciones municipales del Ayuntamiento de Jaca, Manuel Pallaruelo.

“Con el precio que pagamos de la electricidad que tenemos contratada en las piscinas y centro termal –es de alta tensión, que es un poco más barata que en una vivienda–, estimamos que el ahorro anual será de unos 6.000 euros. Esto implica que el proyecto, que costará 120.000 euros, según el precio de licitación, aunque esperamos que finalmente se ajuste un poco a la baja, el retorno de la inversión será de 20 años”, apunta. “Pero este análisis es algo incompleto”, aclara, “porque, en realidad, de esos 120.000 euros, 60.000 se destinan a la instalación de producción eléctrica y el resto a la construcción de las tres estructuras que no solo servirán de soporte para las placas, sino que, además, tendrán otra función, la de dotar a las piscinas exteriores de espacios de sombra y para la realización de actividades”. Por ello, “sería partidario de hacer un análisis del retorno de la inversión considerando esos 60.000 euros que van a costar las placas solares. En este caso, estaríamos hablando de un periodo de retorno de la inversión de diez años considerando el precio de la electricidad a día de hoy. En realidad, teniendo en cuenta que el precio de la electricidad sube cada año, la inversión podría estar amortizada en siete u ocho años, sin contar el coste de las estructuras”, precisa.

Manuel Pallaruelo reconoce que la rentabilidad de estas instalaciones a corto y medio plazo será cada vez mayor porque, aunque la mejora de la eficiencia de los paneles fotovoltaicos tiene escaso margen de año en año, su coste sí es bastante menor. “Cada año es más barato hacer una instalación de este tipo. Y a ello hay que añadir las repercusiones medioambientales de una energía limpia como la fotovoltaica. El Ayuntamiento de Jaca va a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y esa es una cuestión que no se contempla en el análisis económico, pero que tiene una clara repercusión medioambiental”, subraya.

Manuel Díez, como concejal de Medio Ambiente, recuerda que, al margen de la rentabilidad económica, “lo que se busca con este tipo de instalaciones es la eficiencia energética y medioambiental”. En este sentido, comenta que, desde que se declaró la Emergencia Climática hace un año, se han ido adoptando distintas acciones que van en esta misma línea. Entre ellas, cita la sustitución del alumbrado convencional por leds tanto en Jaca, como en los pueblos; la adquisición de vehículos eléctricos para la Policía Local y otros servicios municipales, y el aprovechamiento de la energía térmica del pabellón de hielo.

“Apostamos claramente por estos proyectos porque permiten la producción de energía renovable, no contaminante y garantizan una eficiencia energética”, asegura.

Módulo de panel fotovoltaico en forma de seta para las pérgolas

Instalación en otros edificios municipales

El Ayuntamiento de Jaca tiene previsto continuar con la instalación de paneles solares en otros edificios municipales, como el ya citado de la Escuela Infantil y Guardería Pública, el pabellón de hielo o el almacén municipal.

“Primero hay que ver cómo funciona en las piscinas y el centro termal, pero la Escuela Infantil nos interesa mucho por sus condiciones específicas: es un edificio que está en uso todo el año y eso hace que la instalación sea rentable. Los colegios serían también un buen lugar para colocar paneles solares, aunque tienen el inconveniente de estar cerrados en verano”, indica Díez.

“Al final, lo más importante para poder aprovechar de la mejor manera posible estas instalaciones es que se consuma toda la electricidad posible durante el día y en verano. Esto hace que, a veces, sea difícil encontrar edificios con condiciones óptimas para ello. Por ejemplo, si pretendiéramos utilizar células fotovoltaicas para el alumbrado público, no podríamos hacerlo a no ser que empleáramos baterías, porque son instalaciones que funcionan de noche. Por eso intentamos buscar consumos energéticos diurnos y estivales, y eso no es del todo fácil”, explica Manuel Pallaruelo.

Las piscinas y el centro termal es el edificio que mejor reúne todas estas características porque tiene bastante consumo de electricidad a lo largo de todo el año, y en verano, sobre todo, por la depuración de las piscinas y el aire acondicionado. “Es un edificio que puede absorber toda la energía que se produzca y que, en caso de que haya excedentes, se pueden revertir a la red y obtener una compensación económica por ello. Es un edificio que se adapta perfectamente, porque tiene mucho consumo durante el día y el verano”, insiste Pallaruelo.

La Escuela Infantil es otro de los inmuebles municipales que se ajustan a estas características, aunque aquí el consumo energético es menor.

Es un centro que tiene “un consumo medio”, pero la idea es dotar a ese entorno de cargadores de vehículos eléctricos que estarían conectados a placas fotovoltaicas colocadas en unas estructuras (pérgolas) similares a las previstas en la zona verde de las piscinas. “La energía generada serviría para la guardería y alimentaría los cargadores eléctricos que podrían ser utilizados por los vehículos de transporte. Nos parece que sería una intervención medioambientalmente impecable, porque se produce energía renovable y al mismo tiempo se eliminan emisiones contaminantes producidas por los combustibles fósiles. Se cierra el círculo”, recalca.

Del estudio realizado para evaluar los edificios municipales que podrían ser rentables desde el punto de vista medioambiental y técnico para albergar este tipo de instalaciones, Pallaruelo, explica que, además del consumo y del uso diurno y estival, se estudiaron otros condicionantes que influyen en la viabilidad de esta clase de proyectos,  como son la orientación y la pendiente de las cubiertas, las horas de sombra y las características arquitectónicas.

“Por ejemplo, el Palacio de Congresos, aunque registra un gran consumo y está abierto en verano, tiene la desventaja de estar rodeado de edificios de gran altura que le generan bastante sombra, por lo que es un proyecto que ha quedado temporalmente aplazado”, indica. “El pabellón de hielo tiene también algunas dificultades, en este caso arquitectónicas, por lo que, en su momento, tendremos que trabajar más a fondo para tratar de integrar las placas en la cubierta”, añade.

Uno de los espacios donde sí resultaría viable la colocación de paneles es el almacén municipal, donde se ubican los servicios de obras del Ayuntamiento. “Actualmente no tenemos un gran consumo eléctrico durante el día ni en verano, pero es verdad que allí hay una gran flota de vehículos que serán eléctricos a corto o medio plazo, por lo que podrían alimentarse con la energía de las placas fotovoltaicas. Es un espacio donde los edificios no tienen ningún problema de orientación ni de inclinación para la colocación de las células solares”, concluye.

Proyecto para construir una hidrogenera verde en Jaca

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Jaca ha mostrado su apoyo al proyecto de descarbonización del transporte público en la ciudad, que presentará la empresa Iberdrola en la Comisión Europea, cuya subvención serviría para construir una hidrogenera verde que se suministraría el gas al autobús urbano. El abastecimiento del hidrógeno como combustible también se podría realizar a otros vehículos, además del autobús municipal. Recordar que este tipo de transporte no emite CO2, solo vapor de agua.

La hidrogenera verde consiste en una planta de producción del combustible hidrógeno mediante el uso de energías renovables. En este caso, se ha previsto que con 500 metros cuadrados de células fotovoltaicas se genere la energía suficiente para producir el hidrógeno necesario. Después, se realiza el proceso para que el hidrógeno sea suministrado como combustible para los vehículos que lo puedan recargar en una instalación de aproximadamente 1.000 metros cuadrados, similar a una gasolinera.

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