
Serrat ha decidido dejar de actuar en público. Sus últimos escenarios, Madrid y Barcelona, han mostrado un Serrat agradecido y, como siempre, entregado a la faena de cantar. Quizás en esta ocasión el público no estuvo tan pendiente de sus canciones como en otras ocasiones. El repertorio elegido, el rostro y las canas de Serrat invitaban tanto o más a reflexionar sobre el paso del tiempo y los 80 años que lleva a cuestas.
Han pasado 58 años, ha dejado huella, claro que sí. Algunos lo recordamos como un muchacho desgarbado, aparentemente tímido, a veces con uniforme militar y, a menudo, rondando por la entrada del Instituto de Enseñanza Media Domingo Miral. Solía esperar sentado en el altillo de la escalera, junto a la puerta derecha que daba acceso al Centro Pirenaico del CSIC. Pero… ¿qué se le había perdido a Serrat por allí?