El Club Hielo Jaca aprovechó el encuentro con el Barça para colaborar con Duchenne Parent Project España, asociación que lucha contra la distrofia de Duchenne, una enfermedad degenerativa, que no tiene cura y que debilita los músculos. En su beneficio se sorteó una camiseta del club. Además, el jaqués Quique Grávalos, afectado y miembro de la asociación, realizó el saque de honor.
“Hay días que uno se despierta y sabe que ese día va a ser especial”, aseguró Grávalos, para el que “fue un honor hacer el saque, recorrer el pabellón, pisar el hielo y mirar a la cara a la gente de Jaca”. “Puede ser rutinario, pero es porque no se tiene un problema como el mío y si no fuera por ello, yo hubiera sido un Choge, un Biec, un Palacín, un Valle o cualquiera de esa generación”, añadió.
El partido fue singular por los equipos que estaban en el hielo. “En Barcelona llevaron el seguimiento de mi enfermedad y Jaca es la ciudad de mi vida, de mi corazón y donde he sido realmente feliz”, dijo, agregando que “aunque el Jaca sufrió en un principio, supo sacar su valía”.