“Mostramos nuestro pleno apoyo al mantenimiento de esta unidad operativa de elite, plenamente consolidada en la comarca”
Rescate realizado por la Guardia Civil en la zona de Panticosa en el verano de 2018. GUARDIA CIVIL DE MONTAÑA
La Comisión Consultiva de Alcaldes del Alto Gállego ha manifestado el “absoluto rechazo de este territorio y sus alcaldes a cualquier movimiento de reestructuración que lleve consigo el desmantelamiento del Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (EREIM) de Panticosa”. El acuerdo fue aprobado el pasado lunes, 14 de junio, en una reunión extraordinaria celebrada en la localidad panticuta, con la presencia de los alcaldes de Biescas, Caldearenas, Hoz de Jaca, Panticosa, Sabiñánigo, Sallent de Gállego, Yebra de Basa y Yésero, así como los de las entidades menores de Escarrilla, Gavín, Piedrafita de Jaca, Sandiniés, Sobremonte y Tramacastilla de Tena. Todos ellos expresaron su apoyo “al mantenimiento en Panticosa de esta unidad operativa de elite, plenamente consolidada en nuestra comarca, por su cercanía, experiencia y gran servicio a la ciudadanía”.
La sesión extraordinaria fue convocada con carácter de urgencia después de que trascendiera la noticia de la posible supresión de este equipo de intervención, sin especificar si sería de manera temporal o de forma permanente, ni cómo afectaría al funcionamiento del resto de equipos que operan en el Pirineo aragonés. En esas mismas informaciones, se apuntaba que sería la unidad de Jaca la que asumiría las intervenciones del equipo de Panticosa en el caso de que se prescindiera finalmente de él.
Los alcaldes y vecinos del Alto Gállego rechazan “cualquier reestructuración que suponga la desaparición de la ubicación en Panticosa de este experimentado equipo de rescate”, y manifiestan que no pueden compartir el planteamiento del cierre de una unidad que lleva más de 40 años de servicio al montañero y a los vecinos de la montaña.
“Ha llevado a cabo rescates en lugares de dificultad extrema precisamente porque su proximidad a las zonas de intervención y su extenso y profundo conocimiento del territorio por el que se mueven les permite realizar su trabajo con unos tiempos de respuesta que, en la montaña y en las condiciones en las que muchos rescates se realizan, pueden suponer la diferencia entre la vida y la muerte”, recuerdan. “Tener su base en Panticosa, a los pies de los picos y valles donde se concentran el mayor número de montañeros y rescates al sur del macizo pirenaico en Aragón, marca la diferencia como también la marca contar en Panticosa con la existencia de un helipuerto que permite minimizar estos tiempos de reacción y maximizar las esperanzas de éxito”, añaden.
Los acaldes subrayan igualmente el reconocimiento que este equipo tiene fuera del territorio, ya que es uno de los que más intervenciones realiza a lo largo del año. “No dejemos por ello que, una vez más, unas supuestas razones de operatividad y optimización de recursos mal entendidos vuelvan a privar al mundo rural de un recurso que se ha demostrado eficaz y necesario”, indican. “Son necesarios porque salvan y protegen vidas, pero también porque son los únicos en rescatar en montaña: allí donde en otros puntos del país intervienen policías autonómicos o bomberos, nosotros solo los tenemos a ellos”, precisan.
Además, “son necesarios” por su vinculación e integración en la sociedad panticuta y la supervivencia económica del valle, recuerdan. “Están presentes en la temporada de invierno cuando las estaciones de esquí reciben a miles de vecinos y visitantes, pero también en verano cuando, atraídos por el valor de nuestros paisajes, son tantos los que se acercan a nuestras montañas. El EREIM informa, controla que no haya accidentes y, llegado el caso, interviene para minimizar las consecuencias de los mismos”, relatan.
Los alcaldes explican que la mejoría de las condiciones sanitarias en estas últimas semanas se está traduciendo en una mayor presencia de visitantes ansiosos por acudir a la montaña y disfrutar de los espacios abiertos. “La tendencia es que la gran afluencia de visitantes que esta comarca recibió en 2020 vuelva a repetirse en los meses próximos. Todos lo sabemos, también los responsables de la Guardia Civil que de forma habitual ya venían reforzando la plantilla de esta unidad durante los meses de estío para ser capaces de dar respuesta al incremento de riesgos que este aumento de visitantes conlleva. No es pues, la desaparición de esta unidad lo que precisamos, sino su mantenimiento y refuerzo de forma consolidada”, concluyen.