Desde la entrada en vigor de la modificación de la ordenanza de animales de Jaca, hay una corriente de animadversión hacia los perros. Una de las actuaciones del consistorio fue la colocación de señales de prohibición de acceso a perros en simples zonas verdes, bajo el pretexto de que son “jardines”.
La tensión entre el Ayuntamiento de Jaca y un grupo de propietarios de perros marcó el pleno del pasado martes, durante el que la modificación de la ordenanza de protección, control y tenencia de animales fue aprobada de forma definitiva y por unanimidad, es decir con los votos de PP, PSOE, Aragoneses, CHA, Vox, PAR y Más Jaca.
Lo que sigue no tiene la intención de originar ningún tipo de polémica, solo es otra opinión. Hace muchos años, vecinos de la calle Albareda presentamos un escrito en el ayuntamiento, y en una entrevista personal con la concejal entonces responsable del área, solicitando que ante la habitual presencia de heces de perros en la acera de esta calle.
Escribo esta carta en calidad de ciudadana, y en representación de muchas personas afectadas, preocupada por la reciente decisión del Ayuntamiento de Jaca de instalar estacas con la indicación “prohibido perros” en diversas zonas verdes de nuestra ciudad.
El Ayuntamiento de Jaca ha lanzado una campaña de concienciación e información, para dar a conocer los cambios que se han introducido en la Ordenanza Municipal Reguladora de la Protección, Control y Tenencia de Animales. Las modificaciones fueron aprobadas provisionalmente en el último pleno municipal, celebrado el pasado 16 de julio, y ahora están sujetas a consulta pública, antes de su aprobación definitiva por la corporación, previsiblemente en la sesión plenaria que se convocará para el próximo 17 de septiembre.