La gastronomía aragonesa, y la jacetana en particular, ha lamentado la pérdida de Gaby Coarasa, que regentó durante cinco décadas el restaurante cheso Casa Blasquico, que fue una de las referencias de la cocina altoaragonesa en una época en la que el turismo gastronómico no despuntaba como ahora. Coarasa falleció el pasado 19 de septiembre en Madrid, a los 90 años de edad, y el funeral se celebró el sábado en Echo.
