Cónclave (2024)
Duración: 118 min. País: Reino Unido. Dirección:Edward Berger. Guion: Peter Straughan. Novela:Robert Harris. Reparto: Ralph Fiennes, Stanley Tucci, John Lithgow, Isabella Rossellini, Lucian Msamati, Carlos Diehz, Sergio Castellitto, Brian F. O’Byrne, Merab Ninidze. Música: Volker Bertelmann. Fotografía: Stéphane Fontaine. Productoras: Access Entertainment, Filmnation Entertainment, House Productions, Indian Paintbrush, Wildside.
El director oscarizado por su film Sin novedad en el frente, Edward Berger, nos presenta una historia enmarcada en la lucha de poderes situada en el seno de la iglesia. Tras la inesperada muerte del Sumo Pontífice, el cardenal Lawrence es designado como responsable para liderar uno de los rituales más secretos y antiguos del mundo: la elección de un nuevo Papa.
El director, adapta la novela de Robert Harris, con guion de Peter Straughan (El topo, Tomas Alfredson, 2011), dotando a la historia de tensión y un cierto carácter detectivesco, y mostrando cómo todos en el cónclave están ávidos de poder. Por supuesto, esta producción remite a un film sobre el mismo planteamiento, un verdadero clásico: Las sandalias del pescador, de 1968, dirigida por Michael Anderson, y adaptación de la novela de Morris West, que mostró con bastante fidelidad el proceso de un cónclave, y las diferentes posiciones de poder, para elegir al adecuado sucesor de Pedro.
Ambas películas, muestran con bastante certeza las tensiones éticas y humanas que existen en quienes representan a la Iglesia. Cónclave es un film que va ganando en interés conforme avanza el metraje, que mantiene la atención del espectador, mientras todo va fluyendo. Aunque, el final de la historia puede que no sea totalmente del agrado de todos.
No remata correctamente, pero en términos generales, merece toda nuestra atención. Aborda con sobriedad y elegancia las intrigas políticas y la diatriba entre lo humano y lo divino, dentro de una institución tan conservadora como la Iglesia Católica. Buenas actuaciones del reparto de actores, destacando al frente Ralph Fiennes con su habitual maestría, que logra dar vida a un personaje complejo, lleno de matices y conflictos internos.
También, resaltar la aparición de Isabella Rossellini y Stanley Tucci. La dirección de Edward Berger, con su habitual sobriedad, impone a esta película un tono serio, que se hace necesario para recrear algo tan místico, tan lleno de pompa y de rituales ancestrales, como es la elección del representante de Dios en la Tierra.
