Ronda de Os Gaiters de Chaca por las calles de Borau, en una imagen facilitada por la asociación Cacaleyo.
Las XIII Jornadas Micológicas y Ambientales de Borau, organizadas por la asociación Cacaleyo, resultaron un éxito en cuanto a la participación, el ambiente festivo y la acogida que tuvieron las actividades programadas, según reconoce la propia entidad organizadora.
“Las salidas micológicas, guiadas por expertos micólogos, registraron una gran asistencia, hasta el punto de que algunos de los interesados en participar no pudieron unirse a los grupos debido a la limitación de plazas”, explican. Los que tomaron parte en la salida tuvieron la oportunidad de aprender sobre las diferentes especies de setas en su propio entorno natural, al tiempo que los más pequeños, disfrutaron de una actividad de iniciación y reconocimiento de aves, que también se llevó a cabo con un gran número de asistentes.
La charla sobre diversidad geológica de la Jacetania fue una de las propuestas destacadas de la jornada del sábado, “proporcionando a los asistentes una visión fascinante de las formaciones geológicas del territorio y su relación con el entorno natural”, indican los responsables de la asociación, que resaltan igualmente la animada y participativa ronda de Os Gaiters de Chaca por las calles de la localidad.
“Los talleres infantiles, dedicados al compostaje y la creación de aves de papel, fueron igualmente un éxito, con una gran participación de los más pequeños, que mostraron mucho interés en las actividades lúdicas y educativas”, señalan.
El mercado artesanal, que ofreció productos de proximidad, estuvo muy concurrido durante el fin de semana, atrayendo a numerosas personas interesadas en apoyar a los productores y artesanos locales. Además, el grupo Lupierra de Jaca proporcionó una valiosa información sobre el consumo responsable y los productos de kilómetro cero, generando un gran interés entre los asistentes.
La parte gastronómica de las jornadas “fue también muy bien recibida, con la preparación y venta de 160 tapas de migas con setas, que se agotaron rápidamente y dejaron a todos con un buen sabor de boca”, se indica desde la asociación Cacaleyo.
El buen tiempo acompañó durante todo el fin de semana y permitió que las actividades se desarrollaran sin contratiempos y en un ambiente agradable y festivo. El cierre de las jornadas fue igualmente especial, con una paella popular que reunió a los participantes en un clima de camaradería y celebración, poniendo el broche de oro a otra edición, “para no olvidar”, en torno a las setas y el medio ambiente, apuntan los organizadores, que agradecen a los asistentes su participación y contribución “al excelente ambiente que se vivió”. “El respeto por el entorno natural y el interés mostrado en todas las actividades programadas han hecho de estas jornadas un evento memorable”, concluyen.