“En Aragón lo tenemos muy claro: ni queremos ni necesitamos placas fotovoltaicas sobre las aguas de nuestros embalses”, aseguró el presidente aragonés
El presidente Azcón anuncia en Lanuza una normativa que restrinja la instalación de placas fotovoltaicas en embalses. FABIÁN SIMÓN
El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, anunció este martes, 23 de julio, en el embalse de Lanuza, la creación por parte del Ejecutivo aragonés de “una normativa que restrinja la instalación de placas fotovoltaicas en nuestros embalses”, una restricción que, como informó, formará parte del próximo Plan Energético de Aragón.
“En Aragón lo tenemos muy claro: ni queremos ni necesitamos placas fotovoltaicas sobre las aguas de nuestros embalses”, señaló el jefe del Ejecutivo, acompañado en su visita del presidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), Isaac Claver, así como de alcaldes del valle de Tena. “Ni estamos dispuestos a que las instalen, ni estamos dispuestos a no dar la batalla para evitarlo”, insistió.
Se trata, dijo Azcón, de una medida con “un impacto medioambiental negativo y que es nociva para el desarrollo económico, turístico y cultural de nuestra comunidad y que genera un importante perjuicio a nuestros regantes”.
En Aragón, después del pasado 9 de julio de 2024, el Consejo de Ministros aprobó un Real Decreto que regula la instalación de placas flotantes en embalses, por lo que un total de 14 pantanos aragoneses serían los afectados por la puesta en marcha de esta medida: Moneva, El Val, Cueva Foradada, Lechago, Gallipuén, Tranquera, La Sotonera, El Grado, Montearagón, Ardisa, La Estanca, San Salvador, Búbal y Lanuza.
“Nuestra comunidad autónoma tiene suficiente territorio –casi el 10% del total de España– como para tener que instalar paneles en nuestros embalses”, comentó Azcón. “Unos embalses que constituyen una parte esencial de nuestro patrimonio paisajístico y que son fuente de actividad cultural, deportiva y turística y, por lo tanto, de desarrollo económico”, manifestó.
En este punto, lamentó que “la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, que desconoce la idiosincrasia de nuestro territorio, autorice la instalación de paneles solares en embalses aragoneses”, que además acogen “numerosas actividades turísticas y económicas”, como actividades deportivas o el festival Pirineos Sur, “una referencia nacional e internacional que atrae cada año a miles de visitantes y artistas de primer orden”.
Del mismo modo, el jefe del Ejecutivo aragonés reivindicó que los embalses “tienen un papel fundamental para los regantes, quienes deben tener garantizado que el 100% del agua almacenada es para uso prioritario de riego, algo que no queda garantizado si se permite que estas instalaciones ocupen hasta un 15% de la lámina de agua”.
“Recogemos, así el testigo de las Cortes de Aragón, quienes el pasado mes de junio, de forma unánime, instaron al Gobierno de Aragón a que no autorice la instalación de paneles solares sobre el agua de nuestros embalses”, apuntó el presidente, que instó a todos los partidos a que “se sumen a esta normativa del Gobierno de Aragón y pueda ser aprobada por unanimidad”.
Sí a las energías renovables
En este punto, el presidente quiso “dejar claro” que “esta oposición a las placas fotovoltaicas sobre los embalses no es una oposición a las energías renovables”, sino “todo lo contrario”.
Así, recordó que Aragón es la cuarta comunidad autónoma con mayor generación de energía renovable –un 13% del total nacional, solo por detrás de Castilla y León, Castila-La Mancha y Andalucía–, y la segunda comunidad autónoma con mayor cuota de producción de energía renovable –el 82% de la energía que se genera en Aragón es renovable, solo por detrás de Castilla y León, con un 89%–.
“Son unas cifras espectaculares que están permitiendo atraer industria electrointensiva a nuestra comunidad, que de otra manera no se fijaría en Aragón”, comentó Azcón, que expuso que “el mejor ejemplo lo tenemos en los centros de datos y el ecosistema tecnológico que a partir de ellos estamos generando”.
En cualquier caso, “una cosa es que estemos a favor de seguir generando energías renovables y otra que estemos dispuestos a hacerlo a cualquier precio”, algo que para el presidente “no tiene ningún sentido y no estamos dispuestos”. “Nuestro patrimonio natural y paisajístico es intocable”, aseguró.