25 AÑOS
Abril 1999
Obras en el patio anexo al claustro de la Catedral de Jaca en una imagen de 1999. EL PIRINEO ARAGONÉS
El Plan Director de la Catedral de San Pedro de Jaca es el documento base que regirá todas las actuaciones, reformas y rehabilitaciones futuras que puedan llevarse a cabo en este conjunto monumental. El proyecto, que ha sido elaborado por un equipo de arquitectos zaragozanos formado por Javier Ibargüen, Ricardo Marco y Jesús Marco, se nutre de tres principios básicos, pensados para hacer que la catedral sea un espacio vivo, funcional y sostenible desde el punto de vista económico: hacer compatibles los oficios del culto religioso con las visitas y la actividad cultural y de investigación que pueda impulsarse a través de la propia catedral, la diócesis o las administraciones públicas. Para ello, se propone, entre otras acciones, el traslado del actual museo diocesano a un nuevo edificio que podría construirse en el espacio libre que existe junto a la biblioteca, la incorporación del claustro al templo como espacio visitable y la remodelación de la torre para la instalación de exposiciones temporales.
El Plan Director de la Catedral de Jaca forma parte del Plan Nacional de Catedrales que ha promovido el Ministerio de Cultura para impulsar la recuperación y restauración de 91 edificios del Estado español que tienen un especial interés por su valor histórico y artístico. El Plan Director de la Catedral de Jaca, ya finalizado, ha tenido un coste de 6,5 millones de pesetas y en él ha participado un equipo de diez profesionales, encargados de levantar los planos de todo el espacio catedralicio, y realizar los estudios históricos, artísticos, arqueológicos y documentales que han sido necesarios. Además de los ya mencionados arquitectos, directores del proyecto, han colaborado tres historiadores del arte: Concha Lomba, Carlos Buil y Juan Carlos Lozano; el arqueólogo José Francisco Casabona; el documentalista Sergio Castillo; la restauradora Carmen Gállego, y la geóloga Cristina Marín.
Este equipo interdisciplinar se ha ocupado de estudiar el monumento y recoger todo tipo de información gráfica o escrita de interés para realizar el diseño del Plan Director. Los arquitectos Javier Ibargüen y Ricardo Marco coinciden en señalar que el levantamiento de los 15 planos que se han hecho de todo el monumento ha sido uno de los trabajos fundamentales, ya que les ha permitido conocer al detalle muchos aspectos por los que se puede seguir de cerca la evolución que ha tenido la catedral a lo largo de sus nueve siglos de historia.
“El edificio es una gran fuente de información y de él salen muchas pistas y detalles que ayudan a comprender los cambios que se han producido”, explican los arquitectos. En el caso de la catedral jaquesa, reconocen que hay componentes “difíciles de entender” para los propios técnicos y estudiosos ya que no se muestran en su estado puro y original, debido a que los elementos románicos aparecen unidos a otros de estilos más tardíos (…)