El área de Fomento está desarrollando un proyecto para evitar que comercios de toda la vida no puedan continuar por no encontrar relevo generacional
La Pastelería La Imperial, en la calle Mayor, uno negocio histórico de Jaca que cerró por jubilación de sus propietarios. EL PIRINEO ARAGONÉS
El área de Fomento del Ayuntamiento de Jaca está trabajando en un novedoso proyecto para evitar, en la medida de lo posible, el cierre de negocios por la jubilación de sus propietarios, es decir, para cambiar el cartel de “cerrado por jubilación” por el de “traspaso generacional”, explica el consistorio jaqués en una nota de prensa.
“Cada día, vemos cómo negocios de toda la vida, con brillantes trayectorias, y que son rentables, bajan la persiana al no contar con nadie que pueda continuar”, se indica en el texto, señalando que con esta iniciativa se pretende dar solución a un problema que no solo se da en el ámbito local, sino que trasciende al nacional. El objetivo es evitar el cierre de establecimientos que mantienen su potencial como negocio.
El proyecto, que ahora se ha dado a conocer, ha obtenido una mención honorífica de la Secretaría de Estado de Comercio y la Federación Española de Municipios, Provincias y Comarcas, en el VI Concurso de Ideas Tecnológicas para el Comercio Minorista.
La idea de esta iniciativa es “alinear todos los recursos disponibles, que ofrecen entidades e instituciones como el Instituto Aragonés de Fomento (IAF), la Cámara de Comercio y los ayuntamientos, y ponerlos a disposición de los empresarios”, se expone desde el área de Fomento.
Lo primero será crear un registro de comerciantes en ciernes de jubilación y emprendedores, para posteriormente realizar un análisis de sus perfiles y un cruce continuo de oportunidades. También se buscarán emprendedores con perfiles concretos y se llevará a cabo una negociación entre las partes. El interesado podrá trabajar durante un periodo de tiempo (15, 20 días, un mes) con el propietario que se va a jubilar. Si la experiencia es positiva, esta fase se ampliará, para que el emprendedor pueda aprender todo lo necesario trabajando con el propietario. Tras ese tiempo, llegaría la elaboración de un plan de traspaso generacional y la firma del contrato.
El emprendedor recibirá acompañamiento en el desarrollo del negocio y también de nuevas líneas de mercado, así como apoyo en esta nueva etapa, en la que llegará la jubilación del comerciante y el traspaso total. Igualmente, se prestará apoyo a demanda, seguimiento y análisis para mejorar el método.
En los próximos tres años se prevé que cierren 20 comercios históricos
Se estima que en tres años habrá medio millón de jubilaciones, lo que significará miles de cierres de comercios por falta de relevo en toda España, se apunta desde Fomento, cuyos responsables recuerdan que “nuestra ciudad no es ajena a este problema”. De hecho, “ya han sido varios los negocios que han cerrado o están a punto de hacerlo, porque no tienen a nadie que continúe con su proyecto de vida”, observan. Calculan que, en los últimos cinco años, han cerrado por jubilación 15 comercios que permanecieron abiertos durante más de 50 años, “algunos de ellos auténticos iconos para la ciudad”. En los próximos tres años, se prevé que 20 comercios históricos cierren por falta de relevo generacional. Es más, “tan solo un comercio tradicional, ha sobrevivido al traspaso generacional en los últimos años”, advierten.
“Esto ocurre porque los comerciantes no tienen familiares que se quieran hacer cargo del negocio; por la falta de acercamiento a la realidad de financiación de nuevos emprendedores o la reticencia a dejar su comercio y sus clientes en manos de desconocidos, entre otras cuestionen”, observan.
Por ello, desde el área de Fomento se quiere intentar paliar esta situación, poniendo a disposición de los comerciantes todos los medios y ayuda necesarios, ya que muchos de esos negocios son rentables y constituyen una parte “muy importante de nuestro atractivo social, cultural y turístico”.