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La visita teatralizada La belleza de la inteligencia, que puede verse en el Patio de la Infanta de Zaragoza, resalta la contribución de la mujer a las Sociedades Económicas de Amigos del País

Toño L’Hotellerie recreando a Samuel Oliván, personaje ficticio de la Ilustración aragonesa y española y último testigo de aquella época de esplendor. DIEGO FERNÁNDEZ

Toño L’Hotellerie es el hombre de las mil caras, capaz de ponerse en la piel de múltiples personajes que transitan por diferentes episodios de nuestra historia –y nuestra vida–, desde el rey Sancho Ramírez hasta un camarero locuaz y desmedido de la Huesca contemporánea. El versátil actor jaqués, después de dar vida a la figura del pintor Francisco de Goya en las visitas teatralizadas que se organizaron la pasada primavera para la exposición Yo soy Goya. La Zaragoza que viví (1746-1775), vuelve a la carga con otro personaje de la Ilustración: Samuel Oliván. En este caso, se trata de una figura ficticia, “el último testigo del esplendor del siglo XVIII, en los albores de la Ilustración en España y Aragón”, explica el actor.

La recreación se estrenó con éxito –y el aforo completo– este pasado sábado, 25 de noviembre, con motivo de otra exposición histórica: La belleza de la inteligencia. El primer paso hacia la igualdad, que puede verse hasta el 7 de enero en el Patio de la Infanta de Zaragoza y que ha sido organizada por la Fundación IberCaja.

Tanto la exposición como la visita teatralizada son un homenaje a las Sociedades Económicas de Amigos del País que en el siglo XVIII dieron un impulso decisivo al espíritu ilustrado para mejorar la vida de las personas y procurar la prosperidad y el desarrollo de la sociedad a la luz de la razón, la educación y del amor a la tierra.

La muestra está centrada en el importante papel de la mujer en dichas entidades, y explica –con profusión de argumentos, episodios históricos y biografías– cómo la incorporación de la mujer a la sociedad con igualdad de derechos fue uno de los principales objetivos que las sociedades económicas de amigos del país pusieron en marcha.

El largo camino hacia la igualdad, esencial para el progreso, tuvo un claro precedente en la ingente tarea que emprendieron las mujeres ilustradas en el seno de estas sociedades económicas: para poder participar en el noble ideal ilustrado y aportar su talento y esfuerzo tuvieron que luchar para que les dejaran hacerlo, y este empeño fue decisivo para ampliar su libertad.

Este es el contexto en el que se mueve Samuel Oliván, el personaje al que da vida L’Hotellerie y que evoca, entre otros muchos episodios y vivencias de aquella época, “las divertidas tertulias barrocas de la duquesa de Benavente en su palacio de la alameda de Osuna, donde conoció a Goya” o “su veneración por la aragonesa Josefa Amar y Borbón, pedagoga, escritora aragonesa y pionera de tantas cosas”, comenta el actor jaqués.

Durante la visita, también aflorarán “los enfrentamientos con el conde de Cabarrús, que se atrevía a decir que la mujer no debía participar en la vida pública ni mucho menos en las Reales Sociedades de Amigos del País, por su falta de recato, fruto de su naturaleza frívola e inestable”. Y hablando de la Ilustración, no podían faltar figuras de referencia de ese periodo: Jovellanos, Campomanes, el conde de Aranda, Goicoechea o Ramón de Pignatelli, que “estuvieron presentes y fueron actores decisivos de aquel momento histórico”, señala.

“Sucedieron muchas cosas”, comenta L’Hotellerie, que, de todas ellas, destaca el papel que jugó “la junta de damas que, contra viento y marea, logró que la mujer acabara ocupando su lugar en la sociedad y mostrando al mundo la belleza de la inteligencia”.

Historia, humor, anécdotas, datos, sucesos y nombres propios de la Ilustración aragonesa y española conforman este nuevo proyecto en el que Toño L’Hotellerie vuelve a sorprender con un monólogo didáctico, lúdico y divertido pensado para un público familiar.

Las visitas teatralizadas son los sábados y domingos a las 12:00 horas, en función de la demanda que haya en cada momento. La próxima está programada para este sábado, 2 de diciembre, si bien es necesario inscribirse previamente a través del teléfono 976 971 926 o el correo electrónico patiodelainfanta@fundacionibercaja.es. El aforo por pase está limitado a 40 personas y el precio de la entrada es de 10 euros, a abonar en efectivo en el momento de realizar la visita.

Cartel de la exposición. DIEGO FERNÁNDEZ
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