Será la “pieza básica” de un “gran evento” para poner en valor la historia de Jaca y que tiene como finalidad “desestacionalizar” la economía local
Puestos de mercado medieval en el entorno de la Ciudadela de Jaca, en la edición de 2022. EL PIRINEO ARAGONÉS
El Mercado Medieval de las Tres Culturas, que iba a celebrarse del 29 al 31 de agosto, ha cambiado de fechas y se desarrollará los días 29 y 30 de septiembre y 1 de octubre. La decisión ha sido adoptada por la concejalía de Desarrollo, Promoción, Turismo y Comercio del Ayuntamiento de Jaca, organizador de esta manifestación que tiene lugar todos los años y que servía de colofón al Festival Internacional en el Camino de Santiago.
El motivo fundamental para este cambio de programación es la “desestacionalización económica”, como explica la concejal y primera teniente de alcalde, Lucía Guillén, que ha avanzado que el mercado medieval se hará coincidir con “un gran evento histórico” en el que se está trabajando y que tiene como finalidad poner en valor la historia de Jaca.
El mercado medieval “será una pieza básica y fundamental” dentro de las actividades de ese “gran evento”, cuyos detalles y características se anunciarán “próximamente”, en una fecha todavía por determinar. Servirá para poner de manifiesto “la historia de Jaca, dando a conocer cuestiones históricas relevantes y que nunca se han puesto en valor, con una apuesta fuerte como la que pretendemos”, aseguró Guillén. “En definitiva, esta nueva iniciativa servirá para poner a Jaca en el lugar histórico que se merece”, concluyó la concejal.
El Mercado Medieval de las Tres Culturas se organiza desde el año 1993 y es la actividad que más público congrega de las programadas dentro del Festival Internacional en el Camino de Santiago. De hecho, en la última edición se estimó una participación cercana a las 70.000 personas en los tres días que duró el mercado, cuyos puestos se ubicaron en las calles del casco histórico y el glacis de la ciudadela, separando las actividades por las culturas que están presentes en él: cristiana, judía y musulmana.
Ahora queda también pendiente de conocer si el cambio de fechas repercutirá en el número de puestos que acudirán al mercado y en la programación que estaba prevista, ya que se cambia de un mes de temporada alta, como es agosto, a otro con menos presencia de turistas y de familias, que eran las principales destinatarias de muchas de las actividades propuestas.