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Festival Internacional en el Camino de Santiago | Sara Águeda. Santa Cilia.

La arpista interpretó en Santa Cilia un concierto dedicado al rey David. FICS

La noche del pasado viernes, Santa Cilia acogió un nuevo concierto del XXXII Festival Internacional en el Camino de Santiago que organiza Diputación de Huesca. Como repertorio, El arpa del Rey David, interpretado por Sara Águeda, con la invitación, como así sucedió, de dejarse llevar e imaginar la historia en su recorrido sonoro. El arpa del Rey David es un programa que cuenta los rasgos de la personalidad y vida del Rey David a través de los ojos del Renacimiento español, uno de los periodos más atractivos de nuestra música. “Las luces y las sombras de este personaje, cuyo atributo es el arpa, quedan dibujados a la perfección con esta maravillosa música”, destacó Sara Águeda.

Fue un bellísimo recital, íntimo y cómplice, sereno como su instrumento, e intenso en brillo y poética. Lo que le resulta más interesante a la arpista es afrontar este repertorio en su práctica original, “donde los músicos y músicas tocaban y se acompañaban al canto. Narrar esas historias de nuestros cancioneros en su forma más austera y habitual”, relató. El Renacimiento español nos ofrece una paleta muy colorida de música, los instrumentos de cuerda pulsada gozan de numerosos libros y tratados. “Antonio de Cabezón es sin duda uno de los compositores más atractivos de este siglo, su grandeza como músico e improvisador queda reflejada en los tratados de Venegas Henestrosa y Hernando de Cabezón, sin olvidarnos de los vihuelistas como Mudarra, Narváez o el famoso Cancionero de Palaciodonde encontramos a Juan del Encina”, enumeró la intérprete ante los ecos de la iglesia de Santa Cilia. Los conciertos de Sara Águeda cuentan mil historias a través de la música. “Les hago partícipes y todos aplauden mi cercanía con el público. Les sorprende mucho que toque y cante, y se mantienen atentos durante el espectáculo para descubrir el final de la historia”, confiesa, como así sucedió en otra noche mágica en este certamen de música antigua. La primera vez que pudo disfrutarse de El arpa del Rey David fue en la Fundación Carlos de Amberes, hace menos de dos años, y posteriormente ha pasado por los Clásicos en Verano de la Comunidad de Madrid, el Festival Sagunt in Excelsis, el Museo del Greco de Toledo, y el Festival Renaiximent de Valencia, entre otros.

Sara Águeda en el concierto en la iglesia de Santa Cilia. FICS

Para la artista, este año está siendo “interesante, con muchos proyectos nuevos, y me llevo la fortuna de haber disfrutado de muchos festivales nacionales tanto sola como en agrupaciones con las que suelo colaborar”. Estos meses también ha pisado importantes escenarios como el Teatro Real de Madrid, la Philharmonie de Berlín, Saint John Smith de Londres, la Opera Royal de Versalles, la Ópera de Copenhague o la Academia de España en Roma. En septiembre grabará su quinto disco como solista después de un año inmersa en una investigación profunda acerca de la práctica musical de las mujeres en el Renacimiento. Se titulará Ellas renacen.

Ahora continúa con la intensa temporada de verano. “Estoy estrenando un recital poético en el Festival Internacional de Teatro junto a Pepe Viyuela y Elena González, y recorro con mis proyectos personales numerosos festivales de verano como Clásicos en el Parque Cabo de Gata (Almería), La Noche en Vela de Benicarló, Festival de Clásicos en Verano (Madrid), la Semana de la música antigua de Casalarreina y Voces de la Lengua (La Rioja) y en el Museo Arqueológico de Veranes en Gijón”, y otro programa muy especial que la arpista realiza con la soprano Cristina Bayón acerca de la vida de la cantante y cómica Manuela Escamilla que ya pudimos disfrutar el día anterior en Echo.

“La música antigua lleva tiempo llenado las butacas de numerosos festivales y salas de España, el público lo demanda, la conexión y cercanía que tiene esta música con el público actual, es sin duda algo notorio y especial. Es posible acercarla a localidades más pequeñas y con ella se da la oportunidad de que todo el mundo disfrute de la cultura de manera activa. Creo que nos queda mucho que ofrecer, hay mucha música aún dormida y tenemos ahora mismo unos músicos y musicólogos que nada tienen que envidiar al mercado europeo”, afirmó Sara Águeda.

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