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Un agente acompaña a la mujer andando por el arcén de la carretera. GUARDIA CIVIL

Una patrulla de Tráfico de la Guardia Civil de Jaca auxilió en la mañana del sábado a una mujer de avanzada edad que se encontraba caminando por la carretera N-260a, en Biescas. Los agentes observaron que la mujer estaba andando por el arcén ayudándose de un bastón, por lo que se acercaron a ella y le preguntaron por el lugar al que se dirigía. Al comprobar que daba muestras de hallarse desorientada, sin saber indicar el domicilio de residencia –aunque sí había dicho que era vecina de Biescas–, le ofrecieron la posibilidad de llevarla a su casa en el vehículo oficial para evitar que continuara caminando por la carretera, con el evidente riesgo que conllevaba para su seguridad; pero ella se negó en rotundo y dijo que quería continuar andando. Viendo que la mujer estaba, evidentemente desorientada, y para no incomodarla, los agentes decidieron ofrecerle seguridad, tanto a pie como con el vehículo oficial, durante aproximadamente un kilómetro, explica la Guardia Civil en una nota de prensa.

El guardia que la acompañaba iba dándole conversación, intentando que recordara la dirección de su domicilio, pero al ver que solo contaba anécdotas, algunas de ellas inconexas, se decidió dar aviso a la patrulla de Seguridad Ciudadana del puesto de Biescas, por si la conocían.

Cuando llegaron a la localidad, fue un vecino en el que la reconoció y dio a los agentes las indicaciones del lugar donde vivía, adonde fue acompañada por las patrullas de Tráfico y Seguridad Ciudadana. Ya en el domicilio, un familiar manifestó que estaba preocupado, ya que la mujer, que llegó en perfectas condiciones, había abandonado el domicilio y desconocía cuál era su paradero.

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