Los vecinos de Ara, junto a la hoguera de san Sebastián. MARTA AÍNSA
Sobre las siete de la tarde del sábado, al anochecer, los vecinos de Ara procedían al encendido de la tradicional hoguera de san Sebastián. Por la mañana, se habían organizado las tareas de limpieza de la nieve, la preparación de la hoguera y el montaje de las mesas en el local social, donde esa noche del 21 de enero se juntaron los vecinos, unas cincuenta personas, para disfrutar de una sabrosa cena con productos a la brasa. Tras varios años sin poder celebrar este día debido a la pandemia de covid-19, esta vez por fin se pudo recuperar una festividad que siempre ha sido tan señalada en el calendario de los de Ara. “San Sebastián, líbranos de todo mal”, que así sea.
Firmado: MARTA AÍNSA
