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Puente la Reina de Jaca muestra su rechazo a una conexión de la A-21 que es “innecesaria” y desviará el tráfico a su paso por la localidad

Un centenar de personas se han concentrado esta tarde en Puente la Reina de Jaca y han cortado la A-21 para manifestar su rechazo al proyecto del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de construir un ramal que conecte directamente la autovía y la carretera N-240 al oeste del municipio, alegando “problemas de seguridad vial y retenciones”.

La protesta ha tenido lugar en la rotonda que da acceso a la localidad, la A-21 (sentido Jaca) y la carretera autonómica A-176 (valles de Echo y Ansó), donde los vecinos de Puente la Reina, acompañados de ciudadanos llegados de otros puntos de la Jacetania, han desplegado varias pancartas y leído un comunicado explicando las razones de su oposición a los planes del ministerio. “Puente la Reina, no al enlace”, “La comarca, en peligro” y “Fomento despilfarra 6 millones de euros” han sido algunas de las consignas que aparecían en las pancartas que han encabezado la manifestación que se ha desarrollado entre las 17:30 y las 17:40 horas, en un momento de tráfico intenso, debido al regreso de los esquiadores y los turistas de fin de semana a sus domicilios. El corte ha estado controlado en todo momento por la Guardia Civil, tanto en Puente la Reina como en la rotonda de Jaca, dando paso alternativo a la circulación por la N-240.

Momentos previos al corte de la autovía. EL PIRINEO ARAGONÉS

Para los afectados, la construcción de este ramal, además de ser “innecesario”, ya que quedará obsoleto una vez entre en servicio el tramo de autovía entre Puente la Reina de Jaca y el límite con la provincia de Zaragoza, aún sin licitar, supone un “despilfarro” económico que asciende a 5.770.433,28 euros.

“Lo que queremos es que terminen la autovía, porque va a ser beneficiosa para la comarca y la provincia”, ha explicado Pablo Martínez, empresario de Puente la Reina y portavoz de los convocantes, que ha insistido en que la conexión planteada lo único que consigue es poner en riesgo el modo de vida de 40 familias de la localidad y de la comarca que trabajan, en su mayoría, en el sector servicios. También ha denunciado la falta de sensibilidad por parte del ministerio, en concreto de la Demarcación de Carreteras del Estado en Aragón, cuyo titular, Rafael López Guarga, no ha atendido hasta la fecha la petición de reunirse con los afectados. “A nosotros, el ministerio no nos considera afectados, aunque lo seamos”, ha señalado Martínez, que ha anunciado que no descartan acudir a la vía contencioso-administrativa para hacer valer sus derechos y reivindicaciones. De la misma manera, solicitan el apoyo del Gobierno de Aragón, a través del departamento de Presidencia y Relaciones Institucionales.

Recordar que el proyecto se encuentra actualmente en periodo de alegaciones y que, de seguir adelante, las obras podrían dar comienzo en el plazo de un año o año y medio. Mientras, el tramo que resta para completar la A-21 entre Jaca y Pamplona, los poco más de 11 kilómetros que discurren por la Canal de Berdún, está sin partida presupuestaria para este año 2022, a la espera de su licitación, aunque sin fecha concreta.

Un centenar de personas se han concentrado y han cortado la autovía. EL PIRINEO ARAGONÉS

Durante la lectura del manifiesto, a cargo del empresario local Ramón Claver, los vecinos han agradecido el apoyo recibido desde el Ayuntamiento de Puente la Reina de Jaca, que la pasada semana aprobó en el pleno una declaración institucional contraria a este proyecto, y ha recordado que se han solicitado las adhesiones de instituciones como la Comarca de la Jacetania y la Diputación Provincial de Huesca.

“Continuaremos buscando apoyos y ejercitando acciones de rechazo hasta que el ministerio abandone definitivamente la idea de llevar a la práctica este despropósito”, ha asegurado.

Ramón Claver ha explicado que la autovía A-21 Jaca-Pamplona “es una obra no solo necesaria para el desarrollo y beneficio de esta comarca, sino también para el conjunto del todo el país”, porque “contribuirá a propiciar un reparto más armónico de la actividad económica y a fijar población en una zona que lleva décadas de reducción demográfica”. Por esta razón, los vecinos apoyan “decididamente la completa realización” de la autovía, al igual que rechazan la construcción de un ramal de conexión para desviar provisionalmente los vehículos del casco urbano que “resulta completamente innecesario, no viene a solucionar ningún problema de fluidez del tráfico actual, está técnicamente mal planteado, supone una inversión desproporcionada y amenaza con perjudicar gravemente a las empresas de la zona, algunos puestos de trabajo y, directa e indirectamente, la falta de servicios de muchos de sus residentes”.

Al igual que Martínez, los convocantes han expresado su malestar con Rafael López Guarga, que “no ha tenido a bien” recibirlos, “ni siquiera ponerse al teléfono, pese a solicitarle de manera reiterada una reunión con él”, una actitud que consideran “impropia de un funcionario público”.

La concentración y el corte de carretera ha finalizado con gritos de “no al enlace, sí a la autovía”, y el anuncio de seguir realizando este tipo de actos de protesta el primer domingo de cada mes, en el caso de que las peticiones de los afectados no sean atendidas por parte del ministerio.

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