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La Despensa Solidaria de Cáritas Diocesana ha incrementado el reparto de alimentos en este primer trimestre del año respecto a las crecientes cifras que ya vienen registrándose desde el comienzo de la pandemia, en marzo de 2020. El número de peticiones ha aumentado de manera exponencial sobre todo desde el pasado mes de septiembre, fecha en la que finalizó la campaña turística de verano, aunque son los meses de diciembre de 2020 y enero, febrero, marzo y abril de 2021 los que concentran la mayor demanda de alimentos por parte de la ciudadanía más vulnerable. Las cifras hablan por sí solas, en diciembre se repartieron 491 lotes, que fue la cifra más alta del pasado año (300 en noviembre, 279 en octubre, 291 en septiembre, 186 en agosto…), mientras que, en este primer trimestre de 2021, se han distribuido en enero un total de 465 lotes frente a los 257 del año anterior; 381 en febrero frente a 310, y 461 en marzo frente a 216.

Este crecimiento en la demanda de alimentos está directamente relacionado con la alta dependencia que Jaca y las comarcas de la Jacetania y el Alto Gállego tienen del turismo, un sector que se ha visto especialmente afectado durante la pandemia. Un ejemplo de ello son las más de 30 familias del valle de Tena que han solicitado ayuda, cuando “nunca antes habían tenido que recurrir a Cáritas”, explicó Marcos Lera, director de Cáritas Diocesana de Jaca en la presentación de la memoria de actividad del año 2020 celebrada este martes y en la que también participaron el obispo de la diócesis, Julián Ruiz, y el voluntario y miembro de la Junta Antonio Miñana.

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