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ACOMSEJA y AEPAG estudian la adopción de nuevas acciones de protesta porque las medidas anunciadas son “insuficientes” y ponen de manifiesto “el desconocimiento” de la realidad empresarial del Pirineo

Reunión de Lambán y Aliaga con las comarcas. GOBIERNO DE ARAGÓN

Los empresarios de la Jacetania y el Alto Gállego se muestran “decepcionados” por el resultado de la reunión que mantuvieron el lunes el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y el vicepresidente y consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial, Arturo Aliaga, con las comarcas aragonesas que cuentan con estaciones de esquí en su territorio. Las propuestas planteadas en el encuentro no han cubierto las expectativas iniciales y, lejos de suponer un alivio a la maltrecha situación económica a la que están viéndose abocadas pequeñas empresas turísticas, comercios y establecimientos de hostelería que dependen del turismo invernal, ha servido para incrementar el grado de preocupación y desánimo que ya existe en el sector.

Pancarta portada por la Junta Directiva de ACOMSEJA durante la manifestación de Huesca. | SE

La presidenta de la Asociación de Empresarios de Comercio y Servicios de la Jacetania (ACOMSEJA), Marian Bandrés, se queja, en primer lugar, de la forma de la convocatoria, ya que las asociaciones empresariales no fueron invitadas inicialmente, aunque al final sí que hubo representación a propuesta de cada una de las instituciones comarcales. De los territorios pirenaicos, además de las comarcas de la Jacetania, Alto Gállego y Ribagorza, estuvieron las asociaciones turísticas de los valles de Sobrarbe, Benasque y Valle del Aragón, así como la Asociación de Empresarios del Alto Gállego (AEPAG). “De la Jacetania no estuvo ninguna asociación empresarial. Estuvimos intentándolo hasta última hora, pero no hubo manera. Estamos muy molestos, muy enfadados con la Comarca de la Jacetania y con nuestro Ayuntamiento por no haber hecho valer que fuéramos a la reunión. Creemos que tenía que haber ido algún representante de ACOMSEJA o de la AEJ”, señala Bandrés, que aclara que la Asociación Turística del Valle del Aragón (ATVA) no es un interlocutor que represente a todo el colectivo empresarial que depende directa o indirectamente de la nieve.

El sentir general de la Junta Directiva de ACOMSEJA y de los asociados es de “decepción” por las propuestas planteadas por el Gobierno de Aragón en esta primera reunión de contacto que, según avanzó Lambán, tendrá continuidad pasadas las fiestas navideñas.

La sensación general en el sector es de “desánimo”, porque hay dudas de que las medidas que se han anunciado sean efectivas e, incluso, que se lleguen a cumplir, se lamenta Bandrés. De hecho, los empresarios turísticos y de comercio no quieren recibir ayudas que luego supongan un incremento de la carga fiscal o asumir un nivel de endeudamiento que ponga en riesgo sus negocios. “Queremos trabajar. No puede ser que familias que viven de la temporada de invierno estén en sus casas sin poder trabajar. Por muchas ayudas que den, no van a solucionar este grave problema”, cuenta con resignación Paz Agustín, propietaria de Deportes Chuss, tienda de material deportivo especializada en montaña y esquí.

“Estamos recibiendo muchas llamadas de socios que están muy preocupados, y lo mismo ocurre con la Asociación de Empresarios del Alto Gállego”, señala Bandrés, que no descarta que pueda realizarse “alguna acción conjunta” con AEPAG, como una movilización de protesta. “Hay que hablarlo, pero los socios lo están demandando”, explica.

Pancarta de la AEJ en la manifestación de Huesca. | SE

Plan de rescate y ayudas a fondo perdido

Los empresarios de las tres comarcas pirenaicas que acudieron a la reunión pudieron plantear todas las demandas y reivindicaciones que se consensuaron previamente en los grupos de trabajo, pero recuerdan que no obtuvieron respuesta, más allá de las medidas anunciadas en la rueda de prensa posterior en la que comparecieron Javier Lambán y Arturo Aliaga. Tanto la presidenta como la gerente de AEPAG, “vinieron muy decepcionadas. Sí que es cierto que los escucharon, que tomaron muchas notas de lo que dijeron, pero no hubo ninguna respuesta y enseguida se fueron a la rueda de prensa”, relata Marian Bandrés.

Los empresarios expusieron el grave momento que está viviendo el sector turístico y hostelero de la provincia, en la línea con los argumentos formulados en la manifestación que tuvo lugar el pasado 23 de diciembre en Huesca.

Una de las primeras medidas que solicitaron es un plan de rescate y ayudas directas y urgentes en consonancia con los efectos económicos que está provocando la pandemia, además del establecimiento de unas condiciones “muy preferentes” de endeudamiento, como una carencia de tres años para los préstamos y los créditos ICO. Los empresarios son conscientes de que esta última opción “implicaría una regresión de diez años” en sus negocios, pero, al menos, serviría para garantizar la supervivencia de las empresas, mantener el empleo y asegurar el futuro de las familias y el territorio.

En esta misma línea, propusieron una moratoria para las hipotecas, el agrupamiento de préstamos para obtener condiciones de devolución más ventajosas y la exención de impuestos, por ejemplo, la liquidación del IVA de un año.

Otras medidas pasan por la extensión de los ERTE, para poder seguir dando cobertura a los empleados que tienen contratados. Su situación en estos momentos “es muy grave”, recuerdan los empresarios, porque se están quedando sin ingresos y recursos económicos para hacer frente a las necesidades básicas diarias.

La movilidad entre comunidades autónomas para que haya un mayor flujo de turistas y reactivar la economía fue otra propuesta de los colectivos empresariales y las asociaciones turísticas. También se pidió un convenio específico para el sector turístico relacionado con la nieve y las estaciones de esquí.

Estudio de medidas pactadas con las empresas

El presidente Javier Lambán, al término de la reunión, recordó que la idea es continuar con los contactos tanto con los empresarios, como con los ayuntamientos y comarcas, después de las fiestas navideñas. “De esta forma, se abordarán soluciones desde dos ámbitos: el del turismo y la hostelería, que también afecta al sector de la nieve, tratando de continuar con las medidas adoptadas este mismo año y revisando y explorando otras, como la de los bonos para incentivar el turismo y la hostelería”, según indicó el Gobierno de Aragón. Son acciones que habrá que comprobar si son “más ventajosas que las ayudas directas”, antes de adoptar una decisión “pactada por afectados y administraciones”, indicaron.

Para el sector de la nieve propiamente dicho habrá que esperar a conocer el impacto del cierre perimetral de las provincias y de las comunidades autónomas que será mayor o menor en función de la fecha de apertura de las estaciones de esquí. Según Lambán, “se trata de atender a las personas y entidades, como hoteles, monitores y economía social relacionada”, quien avanzó que se plantea de recuperar viejas fórmulas para incentivar la presencia de esquiadores. Ello –advirtió– dependerá de la evolución de los contagios y cómo está afectando la pandemia a otras comunidades.

Además de las ayudas del propio Gobierno de Aragón, en coordinación con las de los ayuntamientos y comarcas, el Ejecutivo autonómico ha iniciado conversaciones con el Gobierno de España para tratar de conciliar y ampliar las prestaciones que se incluyen en el nuevo plan de choque estatal anunciado en la Conferencia Sectorial de Turismo y Comercio. Algunas de estas medidas, según apuntó Arturo Aliaga, son la extensión de los ERTE, bonificaciones al trabajo fijo discontinuo que, pensadas para el sector de turismo de playa, puedan aplicarse también al sector de la nieve, así como otras medidas tributarias, aplazamiento de préstamos ICO (amortización y carencia), nueva línea de ICO con garantía de hasta el 90%, reducción en la tributación por módulos (que el descuento pase del 5% al 20%), disminución del pago de tributos, como un 50% en la cuota de la Seguridad Social para los trabajadores fijos discontinuos que no entren en los ERTE en diciembre de 2020 y enero de 2021, y ayudas a los arrendamientos.

Aliaga indicó que estas medidas de choque del Gobierno central pueden ser “muy útiles”, complementadas con los ERTE y préstamos ICO.

En el caso de Aragón, dijo que el segundo plan de choque ya ha registrado 472 expedientes para ayudas directas que se complementan con las del plan anterior de 6 millones de euros.

En el presupuesto de 2021 se incluyen cuatro ejes de trabajo en esta materia: mantener vivo el apoyo a asociaciones turísticas, con más de un millón de euros; bonos turísticos, que cuentan con una partida de 500.000 euros ampliable para el estímulo de la demanda; ayudas a la adaptación de locales para hacerlos más seguros, con 1,4 millones de euros presupuestados y, por último, ayudas a la promoción, cuya cuantía aún está por determinar.

Desconocimiento de la realidad del Pirineo

La Asociación Turística del Valle de Tena (ATVT) lamenta que no fuera invitada por la Comarca del Alto Gállego a asistir a la reunión de Zaragoza, a diferencia de lo que ocurrió con otras asociaciones turísticas del Pirineo. “Queremos expresar el malestar de los empresarios del valle de Tena por dicha decisión y reivindicar el peso que se merecen dentro del sector turístico aragonés, ya que somos la única asociación de la comarca que engloba la estación de esquí, escuelas de esquí, empresas de actividades, turismo activo, alojamientos, restaurantes, comercios y servicios, que son, sin duda, los principales afectados, y a los que ‘supuestamente’ se está representando sin haber sido escuchados previamente”.

Hecha esta puntualización, consideran que el encuentro del lunes ha servido para poner de manifiesto “el desconocimiento”, por parte de los representantes políticos, de la situación económica y laboral en la que se encuentra el Pirineo como consecuencia de las medidas restrictivas aplicadas en los últimos meses por la pandemia.

Respecto a las acciones concretas expuestas en el encuentro, señalan que “la economía de la nieve no requiere incentivar la demanda con bonos”, sino “socorrer la oferta, con ayudas a fondo perdido”. Del mismo modo, creen que no hay que esperar hasta abril para hacer un balance de la temporada porque “el mal ya está hecho”. “Las pérdidas de la temporada turística que llevamos cerrados, con los puentes de Todos los Santos, Constitución e Inmaculada y la Navidad de por medio, son definitivas, aunque pudiera abrirse el confinamiento más adelante”.

Sobre las ayudas económicas apuntadas por Aliaga, los empresarios tensinos no dudan en asegurar que son “insuficientes” y “ambiguas”. “Presumen de apoyar a los arrendatarios, pero es a costa del sacrificio de los arrendadores, mientras que a los pequeños dicen que les permitirán computar los descuentos de alquiler como gasto deducible en la renta de 2021, lo que, además de incomprensible, no se hará efectivo hasta junio de 2022”, relatan.

Además, “nos aplazan la campaña de impuestos de abril, siendo que tenemos la de enero a menos de un mes, y tendremos que pagar los impuestos de la poca actividad del trimestre con los negocios cerrados”. Es más, “recogen una reducción de hasta el 35% del rendimiento neto calculado en el régimen de módulos al que se acogen muchos negocios de hostelería, cuyos aforos han estado cerrados estos meses en Aragón y ahora reducidos en un 70%”.

La ATVT recuerda que cuando acudieron a la manifestación del 23 de diciembre en Huesca, estos incentivos ya eran conocidos por los empresarios, por lo que esperaban otras medidas de apoyo distintas a las expuestas en la reunión, en definitiva, “un mayor compromiso con el sector de la nieve” y “una mayor sensibilidad con los vecinos de los pueblos del Pirineo”.

Manifiesto 23 de diciembre

La ATVA mostró en la manifestación el lema y logotipo de la iniciativa SOS Nieve. | SE
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