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La idea es que esta visita, dedicada a los riesgos naturales, se compatibilice con la de la estación internacional

Inés Veintemilla, concejal de Medio Ambiente; Fernando Sánchez, alcalde de Canfranc, y Alex Varela, responsable de la empresa que se ha encargado de la confección de los paneles expositivos. EL PIRINEO ARAGONÉS

El Centro Pirenaico de Referencia para la Gestión de Riesgos de Montaña de Canfranc A Lurte ha renovado su área expositiva con la idea de vincular esta visita a la de la estación internacional. Para ello, se ha dado un nuevo enfoque a las salas y espacios, que hasta ahora se centraban en explicar los fenómenos naturales relacionados con la nieve, ampliándose los contenidos a todos aquellos riesgos que pueden desencadenarse en una zona de montaña como el Pirineo.

El alcalde de Canfranc, Fernando Sánchez, recuerda que para levantar el núcleo de población de Los Arañones y construir la estación internacional, a finales del siglo XIX y principios de XX, fue necesario repoblar el monte con miles de árboles, canalizar el río Aragón y construir muros y barreras de protección en las zonas altas de la montaña y en los barrancos, para impedir avenidas de agua, la caída de avalanchas y desprendimientos de rocas.

“La gente que viene a ver la estación internacional desconoce estos trabajos, y por esta razón queremos ofrecer la posibilidad de que los visitantes los conozcan, combinando la visita que se realiza a la estación con la de A Lurte”. En este último caso, no será una actividad guiada, sino libre, y podrá hacerse tanto de manera conjunta, como por separado. Será a partir de este sábado, 26 de diciembre, y las entradas podrán adquirirse en la Oficina de Turismo, que se ha hecho cargo de la gestión de A Lurte.

Inversión y contenidos

El cambio de imagen y la adecuación del centro pirenaico para la gestión de riesgos de montaña ha supuesto una inversión de 10.000 euros, un desembolso “importante” para un ayuntamiento como el de Canfranc, que para el mantenimiento y explotación de las instalaciones cuenta con la ayuda de la Diputación Provincial de Huesca y la Comarca de la Jacetania, que aportan 25.000 y 10.000 euros al año, respectivamente.

El nuevo discurso expositivo sobre los riesgos naturales empieza en la planta baja del edificio, con una zona en la que se ofrece información sobre los diferentes riesgos que se dan en la montaña pirenaica. Se explica qué es un riesgo natural y se analizan y evalúan los fenómenos más frecuentes que, cuando se desencadenan, pueden provocar cuantiosas pérdidas económicas, daños ambientales severos y graves afecciones a las personas. También se dan pautas para saber cómo hay que gestionar estas situaciones y se recuerda que, en Aragón, desde el año 2004, ya se dispone de una normativa sobre evaluación de los riesgos naturales que “ha supuesto un hito en la consideración técnica de esta materia”, como se recoge en el primer mural, situado en la zona de recepción.

También en la planta baja, pero en la sala habilitada para la celebración de actividades públicas, talleres y cursos, se reúne información relativa a los incendios forestales desde una perspectiva pirenaica, aragonesa y nacional. Entre las numerosas reflexiones e indicaciones que se incluyen en los paneles, se recuerda que “la prevención eficaz y la protección de bienes y personas contra el riesgo de incendios deben planificarse a escala de paisaje”.

En la primera planta, se mantienen la sala sobre nivología y aludes y el espacio que recuerda a los Ayerbe, familia que fue pionera en la preservación de aludes y avenidas torrenciales en Los Arañones, coincidiendo con la construcción de la estación internacional y los edificios que conforman el actual núcleo de población.

Estos contenidos se completan con los dedicados a las inundaciones poniendo como ejemplo las labores de repoblación forestal y las medidas de restauración hidrológico-forestal que se llevaron a cabo para proteger el entorno de Canfranc Estación, en concreto en el barranco de los Meses y el Torrente de Arás.

Finalmente, en la tercera planta se habla de los movimientos de ladera, haciendo hincapié en las causas y factores desencadenantes de este tipo de fenómenos en las montañas aragonesas: lluvias intensas o derretimientos rápidos, heladas y deshielo, cambios bruscos de las condiciones hidrogeológicas y la erosión o socavación del pie de la ladera, principalmente.

Gestión directa

El Ayuntamiento de Canfranc ha optado este año por gestionar A Lurte de forma directa, a través de la Oficina de Turismo, si bien, durante este invierno, no se podrá contar con el servicio de información nivológica del valle que se ofrecía a través de los boletines sobre el estado de la montaña que se emitían varios días a la semana. “Nos gustaría recuperar la información de aludes”, reconoce Sánchez, que avanza que próximamente se firmará un convenio con la Asociación del Conocimiento de la Nieve y los Aludes (ACNA) para impartir cursos de formación, en la línea de los que se venían organizando en años anteriores. Además, se está trabajando para desarrollar actividades a través de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

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